Pago de los incentivos a nuestros héroes: la satisfacción del deber cumplido
Por MANUEL ENRIQUE SÁNCHEZ AGUIRRE
Presidente Fecolfutsalón

No pudo cerrarse mejor la semana que con una de las noticias más importantes que haya generado nuestro deporte en la última década.
Más allá de la alegría que compartí con los jugadores al poderles confirmar la consignación a cada una de sus cuentas de los premios que se les adeudaba por concepto de los títulos mundiales de 2013 y 2015, lo también significativo fue el hecho que el Estado legitimó el microfútbol al depositar más de $600 millones, con los cuales cumplió con una vieja promesa y le dio altura y relevancia a los logros que nos erigen en conjunto como el más ganador en la historia deportiva del país.
Esos $601’100.O00 le devolvieron la credibilidad a quienes le han dado tantas glorias a Colombia, en un claro ejemplo de lo que significa la gestión de la Federación, de su trabajo ininterrumpido exigiendo lo que por derecho propio les corresponde a nuestros jugadores: recibir sus premios por los títulos en Barrancabermeja, cuando la selección femenina se alzó con el máximo trofeo y la de mayores varones, cuando se sumó la tercera estrella mundial en la máxima categoría en Biolorussia.
Para las 13 jugadoras y técnico de la selección nacional femenina fueron $287’400.000, mientras que, para los 12 integrantes del equipo masculino, más el técnico, la cifra llegó a los $313’700.000.
Pero esta noticia también fue producto del respaldo que siempre le dio al tema la actual directora de Coldeportes, la doctora Clara Luz Roldán, quien desde que tuvimos la oportunidad de conversar por primera vez en su condición de “primera dama del deporte colombiano”, nos dio su palabra de estudiar el tema, darle diligencia y acelerar los pagos… y a fe que cumplió.
Se que todavía muchos ni siquiera alcanzan a imaginar lo que significa para el microfútbol colombiano este hecho, que más que un asunto netamente económico, se convirtió en un acontecimiento categórico a nuestro papel como “embajadores” de buenas noticias para este país, y lo que, a partir del mismo suceso, recalará en cada uno de los jugadores activos de nuestras selecciones.
Algunos, inclusive, ya están retirados de la actividad o ya no hacen parte del proceso, pero era un deber que teníamos desde la dirigencia para aquellos que lo dieron todo para que un país celebrara al ritmo de sus actuaciones. Como lo escribió en su muro, la misma arquera de la Selección Colombia, Laura Gómez: “Así como se compartió que había deudas pendientes hoy se debe compartir que @coldeportes ha cumplido a los deportistas y cuerpo técnico con los incentivos económicos. Es un gran espaldarazo y motiva para seguir trabajando fuertemente”.
Y resalto lo anterior también para advertir que desde el seno de la Federación que yo presido no hubo descanso en el tema mientras personas inescrupulosas utilizaban las redes sociales para desprestigiar nuestra labor y confundían a los mismos jugadores que se dejaban tentar por la desinformación. Como se dijo en su momento cuando se dio a conocer esta espectacular noticia: JUGAR MICRO SÍ PAGA…
Hoy, sé que las condiciones son difíciles en nuestro deporte, pero ahí seguimos en la brega, regalándoles a la gran familia del microfútbol colombiano noticias de tantos quilates como la de los incentivos, así como sus dos copas en instancias de semifinales. Seguimos llenando coliseos; seguimos brindando espectáculo; nuestros jugadores se siguen luciendo y todo un país nos vuelve tendencia cada sábado y domingo, cuando nuestro micro ocupa lo largo y ancho de la pantalla de televisión con la emisión a través de Señal Colombia.